Las pruebas más habituales que se realizan en las unidades del sueño son la polisomnografía y la poligrafía.

Multimedia

Las más habituales son:

POLISOMNOGRAFÍA

Es una prueba diagnóstica que monitoriza de forma continua la calidad y estructura de sueño, la respiración, la frecuencia cardiaca y los movimientos del tórax, abdomen y las piernas. mediante diferentes sensores colocados en distintas partes del cuerpo. Se realiza durante una noche de ingreso hospitalario en una Unidad de Sueño.

POLIGRAFÍA

Es una prueba más simple que la polisomnografía ya que no monitoriza el sueño, sino sólo la respiración nocturna con diferentes sensores y puede realizarse en domicilio.

En este enlace dispone de más información sobre ambas pruebas diagnósticas.

Habitación del sueño para realizar estudios

Otras pruebas que se realizan en la unidad son:

ACTIGRAFIA

La Actigrafía es una prueba que mide la actividad y reposo en su medio habitual, y que de manera indirecta nos proporciona información sobre posibles trastornos del sueño.

Se realizará en su propio domicilio sin estar condicionado por los horarios ni el entorno hospitalario. El tiempo de registro de esta prueba del sueño puede variar de un día a una semana según la orden médica.

¿Cómo colocar el actígrafo?

El actígrafo es un dispositivo pequeño y cómodo que se usa como un reloj en la muñeca y se coloca en la muñeca del brazo no dominante, es decir la mano que menos se utilice. En el caso de los bebés se colocará en la pierna.

Es importante no cubrirlo con la manga para no tapar el sensor que lleva incorporado y nos permita captar la exposición a la luz y no ducharse con él puesto.

El registro de esta prueba irá acompañado siempre de un diario de sueño, que se le dará con el actímetro, en el que anotará diariamente la hora de levantarse, acostarse, actividades que realice o tiempo que se quita el dispositivo.

TEST DE LATENCIAS MÚLTIPLES DEL SUEÑO (TLMS)

El TLMS es la prueba gold estándar para la valoración de la somnolencia. Es una herramienta fundamental tanto para el diagnóstico de la Narcolepsia como de las Hipersomnias.

Antes de realizar un test de latencia múltiples de sueño se necesita una Polisomnografía (estudio completo de la noche anterior) para comprobar que la calidad de sueño previa a la prueba es la adecuada con horas suficientes de sueño.

El montaje necesario para la realización del TLMS incluye electrodos frontales, centrales y occipitales de electoencefalograma (EEG), los del electrooculograma (EOG) y los del electromiograma en mentón (EMG) y electrocardiograma (ECG).

¿Cómo se realiza el Test de Latencias Múltiples del Sueño?

El TLMS consiste en el registro de 4-5 siestas de unos 20 minutos que se realizará cada dos horas desde que se despierta de la PSG. Se coloca al paciente en una cama de habitación confortable, tranquila y oscura. Se indica al paciente que debe estar tranquilo, en una posición cómoda con los ojos cerrados e intentando dormir. Entre las siestas al paciente no le está permitido dormir y la nicotina no está permitida 30 minutos antes de la siesta.

Si el paciente inicia sueño en cualquier momento dentro de los 20 minutos, hay que realizar 15 minutos de registro desde ese momento para finalizar el registro y para dar la oportunidad al REM de aparecer. Si el paciente no se duerme dentro de los 20 minutos, entonces finaliza la siesta.

En el TLMS se calcula la latencia media de sueño que es el promedio del inicio del sueño de las 5 siestas y el número de siestas con REMs.
Una latencia de menos de 5 minutos y dos o más entradas en fase REM son indicativas de narcolepsia.

TEST DE MANTENIMIENTO DE VIGILIA (TMV)

La excesiva somnolencia diurna se asocia a riesgos individuales o colectivos cuando afecta a conductores, transportistas o profesionales en los que el mantenimiento de la vigilia es una exigencia fundamental. El TMV tiene interés en este ámbito, como evaluación y medida objetiva ya que nos permite valorar la respuesta a un tratamiento o intervención.

A diferencia del test de latencias múltiples del sueño (TLMS) que evalúa la capacidad de dormirse de un individuo, este test permite objetivar la capacidad de permanecer en alerta en condiciones de baja estimulación o soporíferas. Para ello, el laboratorio debe asemejar las condiciones cuando el individuo está sentado y tranquilo, en situaciones de pasividad.

¿Cómo se realiza el Test de Mantenimiento de Vigilia?

El TMV consta de 4 exploraciones de una duración de 40 minutos cada una, separadas en intervalos de 2 horas, que dará comienzo entre 1,5 y 3 horas después de la hora habitual en la que el paciente se despierta. Es recomendable realizar una polisomnografía la noche previa, aunque no indispensable, así como la realización de un diario de sueño previo, según el criterio del clínico que solicita la prueba.
En cada exploración, el paciente debe intentar evitar dormirse.

¿Qué indicaciones tiene un Test de Mantenimiento de Vigilia?

• Evaluación de la capacidad de permanecer despierto en conductores o profesionales en los que el mantenimiento de la vigilia es de importancia vital.
• Discordancia entre la percepción del paciente de su excesiva somnolencia diurna (ESD) y pruebas realizadas en la Unidad de sueño: telemonitorización, adherencia, actigrafía…etc.
• Capacitación o incapacidad laboral.
• Estudios de investigación.