En este momento, la diabetes es una enfermedad crónica incurable.
Afortunadamente, el futuro es esperanzador por las múltiples líneas de investigación actuales. Destacar especialmente en relación a la diabetes tipo 1, el trasplante de islotes pancreáticos (grupos de células productoras de insulina) o el implante de células madre que darían lugar a nuevas células productoras de insulina. Otros tratamientos como el trasplante mixto de riñón y páncreas han demostrado eficacia en pacientes con diabetes y enfermedad renal avanzada, sin embargo, estos pacientes precisan medicamentos con efectos potencialmente graves para evitar el rechazo de los órganos. En casos aislados se está comenzando a utilizar el trasplante únicamente de páncreas.
En relación a la diabetes mellitus tipo 2, se ha asociado la cirugía bariátrica (encaminada a la pérdida de peso) con la remisión de la diabetes, no sólo asociada a la pérdida de peso sino a cambios en la producción de hormonas gastrointestinales.