Escuela de Pacientes del Servicio Riojano de Salud
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Es preciso conocer perfectamente el manejo de los dispositivos y la técnica de administración. Algunos aspectos esenciales para la correcta utilización de la insulina son los siguientes:

  • La insulina debe guardarse en la nevera, excepto el dispositivo o vial que se esté usando, que se conservará en lugar fresco a una temperatura inferior a 30 ºC durante un máximo de 4 semanas.
  • El dispositivo debe purgarse para eliminar el aire y ha de agitarse suavemente para no producir burbujas.
  • El farmacéutico debe asegurarse de que el paciente conoce perfectamente el ajuste de la dosis que administrar en cada momento.
  • No es recomendable utilizar las agujas más de una vez.

 El tratamiento con insulina incrementa el riesgo de hipoglucemias: el paciente tiene que saber reconocerlas y cómo actuar para recuperarse.

Fundamentos científicos: Diversos estudios demuestran que las personas que utilizan insulina a menudo siguen una ejecución incorrecta de la técnica y cometen errores en los diversos pasos. Esto reviste gran importancia, pues, dependiendo del error, puede afectar a la concentración y la dosis de insulina que se inyectan. Por ejemplo, una incorrecta homogeneización del vial puede hacer que las dosis sean imprevisibles, desde ponerse prácticamente sólo el excipiente en algunas ocasiones hasta inyectarse insulina en altas concentraciones en otras. Curiosamente, se hace mucho hincapié en las dosis y, en cambio, no se evalúa la correcta ejecución de la técnica. A fin de que profesionales y farmacéuticos digamos lo mismo, vamos a repasar los pasos que deben seguirse:

  • Asegurarse de la fecha de caducidad del vial antes de iniciarlo.
  • En las insulinas NPH o mezclas, mover el vial hasta su correcta homogeneización. Una técnica correcta consiste en moverlo como el limpiaparabrisas de un coche 20 veces.
  • Marcar la dosis.
  • Hacer un pliegue para clavar e inyectar la aguja con un ángulo de 90º.
  • Soltar el pliegue y sujetar el vial con una mano para que no se mueva la aguja del lugar de inyección.
  • Inyectar lentamente la insulina hasta el final.
  • Una vez inyectada la dosis, esperar 10 segundos antes de sacar la aguja de la piel.
  • Retirar la aguja y oprimir (y no masajear) la zona otros 10 segundos.
  • Cambiar la aguja en cada inyección. Cada vez que se cambia, hay que marcar y desechar dos unidades para «purgar».
  • No utilizar un vial más de 4 semanas.
  • Guardar la insulina en lugar fresco y seco, protegiéndola de la luz solar directa y de los cambios bruscos de temperatura.
  • Observar las zonas de inyección para asegurarse de que no hay zonas endurecidas o enquistadas, lipoatrofia o lipodistrofia, zonas eritematosas, etc.
  • Guardar una distancia de 2-3 cm de un pinchazo a otro para no cargar la misma zona.